El Tribunal Supremo afirma que los políticos deben asegurarse de que los que están actualmente en la prisión bajo la acusación de blasfemia, no esten allí de manera fraudulenta ya que ha habido numerosos casos de disputas menores que han llevado a cristianos en su mayoría a prisión.

El fallo de la corte afirma: “Por lo tanto, el Estado de la República Islámica de Pakistán debe asegurar que ninguna persona inocente se vea obligada o forzada a enfrentarse a una investigación o un juicio sobre la base de acusaciones falsas o falsas en relación con comisión de un delito “.

En pakistán las sanciones por haber sido declarado culpable de blasfemia puede ser grave, comenzando con multas, pero lo más extremo puede ser la pena de muerte. Sin embargo, por fin la justicia llega a favor de los cristianos y muchos alcanzarán la libertad.

Los cristianos en Pakistán representan una pequeña minoría, que representa menos del dos por ciento de la población total.

Publicado por Diario El Rompimiento