En un comunicado. difundido en oportunidad de la celebración del Noruz, el año nuevo iraní, Barack Obama elevó la tensión en medio de las negociaciones con Teherán por el plan nuclear persa al pedir la libertad inmediata para el pastor iraní-estadounidense Said Abedini, detenido en septiembre de 2012, acusado de haber “perturbado la seguridad nacional” con sus actividades religiosas y condenado a ocho años de cárcel.

Abedini, nacionalizado estadounidense tras haberse casado con una ciudadana de ese país, ha negado siempre las acusaciones que le formuló el gobierno iraní.

Luego de que lo trasladaron a una de las peores cárceles iranies, Naghmeh Abedini su esposa  manifestó publicamente que estaba muy decepcionda por la poca acción del mandatario estadounidense para lograr la libertad del pastor.

Y más reciente aún, el evangelista Billy Graham se unió a las voces que en todo el mundo han exigido a Obama hacer algo para sacarlo de prision y regresarlo a Estados Unidos.

Los otros prisioneros para quienes se exige su pronta liberación, son el ex marine Amir Hekmati, detenido desde 2011 y el periodista Jason Rezaian, arrestado en julio de 2014.

Obama también pidió que Irán que arroje luz sobre el paradero de Robert Levinson, desaparecido misteriosamente hace ocho años en la isla iraní de Kish.